Publicado: 19 de Marzo de 2016
La gripe felina es una enfermedad muy frecuente, que aunque puede llegar a causar la muerte, en la mayoría de los casos la recuperación es completa.
Existen dos virus de la gripe felina: el Herpesvirus felino y el Calicivirus felino, y la enfermedad puede estar causada por uno de ellos o por los dos. Los síntomas son estornudos, descarga nasal y ocular, pérdida de apetito, fiebre y postración.
Es una enfermedad más frecuente en lugares donde se concentren muchos gatos y los más propensos son los que no están vacunados, así como los gatitos, los gatos mayores y los inmunodeprimidos. El contagio puede producirse desde un gato enfermo, desde gatos portadores o a través de comederos, ropa u otros objetos.
Durante el tratamiento es probable que no quiera comer, por lo que habrá que ofrecerles un alimento muy atractivo, incluso puede llegar a ser necesaria la hospitalización y la alimentación por sonda.
Extraído de: Royal Canin