Control de las colonias felinas

Publicado: 25 de Mayo de 2016

Seguro que todos vosotros os habéis percatado alguna vez de la presencia de gatos en las calles. Estos gatos se agrupan formando colonias felinas, es decir, un conjunto de gatos que viven en libertad, bien sea en un entorno urbano o rural. Si bien algunos de estos gatos fueron en su día gatos domésticos abandonados o que no supieron volver a su casa, y que por tanto, tienen cierto grado de socialización, la mayoría son gatos asilvestrados que normalmente huyen de las personas y que no pueden vivir encerrados, sino que necesitan hacer su vida salvaje en libertad.

Debido a varias causas, actualmente en muchos municipios existe una superpoblación de estos gatos, dando lugar a problemas de todo tipo, como suciedad, enfermedades y derivados del comportamiento de los gatos sin esterilizar (maullidos, peleas, etc). Se han propuesto varias opciones para el control de la población felina en las calles, todas ellas sin éxito, hasta la implantación del programa CES.

El programa CES, Capturar-Esterilizar-Soltar, consiste en capturar a los miembros de una colonia, someterlos a control sanitario y esterilización por parte de un veterinario autorizado, y devolverlos a su lugar de origen marcados con un corte en la oreja (para diferenciarlos del resto). Con esta medida, impedimos la reproducción de estos gatos, y por tanto, el número de gatos irá decreciendo poco a poco, hasta lograr un equilibrio, teniendo en cuenta que es muy difícil que desaparezcan por completo.

Pero no sólo consiste en esterilizar y soltar a los gatos, sino que el programa CES lleva implícito un programa de control de estas colonias, llevado a cabo por los voluntarios, y que consiste en:

• Proveer de alimentación y agua
• Proveer de refugio
• Monitorizar los miembros de la colonia (número de gatos en cada colonia, nuevos gatos que ingresen, bajas…)
• Aportar cuidados sanitarios
• Fomentar la adopción de gatos susceptibles de ellos y la coexistencia entre vecinos y gatos

Los objetivos por tanto son, el cuidado de estas colonias en su propio hábitat y su control sanitario y reproductivo. Las ventajas que obtenemos de ello son:

• Control de plagas (sobre todo roedores e insectos) y consecuentes enfermedades que estos animales nos puedan transmitir
• Eliminación de las peleas entre gatos y maullidos molestos por el celo
• Inhibición del marcaje con orina y heces y disminución de los olores asociados a éstos
• No se reproducen, y por tanto, disminución paulatina de la población
• Gatos sanos controlados que no contagian nada
• Zonas de alimentación de los gatos ocultas, limpias y sin molestar a los vecinos. Los gatos vagan menos y son menos visibles
• Favorece la colaboración de personas anónimas y protectoras, disminuyendo la afluencia de animales a estas últimas.

Además, fomentar el control de estas colonias inculca valores de respeto hacia los animales y de convivencia con el entorno desde edades muy tempranas. Se fomenta la coexistencia en contra de la “eliminación de aquello que molesta”.

Atuora: María Iniesta

VIR 1º año HCV